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El paciente acudió a Urgencias tras no reducírsele la erección de su miembro durante 48 horas
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Los bomberos de Leganés usaron una pequeña radial para llevar a cabo la ‘intervención’
De curiosa al menos puede calificarse la intervención que debieron llevar a cabo los bomberos de Leganés el pasado fin de semana. El servicio local de Bomberos recibió una llamada de las Urgencias del Severo Ochoa. Un varón permanecía con el pene erecto estrangulado en la base por una arandela.
El paciente había acudido al servicio de Urgencias de hospital leganense tras llevar 48 horas con el miembro viril en tan incómoda postura. Después de un relato nada sencillo a los sanitarios, en el desempeño riguroso de sus funciones, ante la imposibilidad de rebajar la citada virilidad se tomó la decisión de llamar a los bomberos.
Uso de una radial
Por extraño que pueda parecer o sonar, el servicio de Bomberos del Ayuntamiento de Leganés se presentó con una radial. El aparato -el mecánico-, de pequeñas dimensiones pero las justas para llevar a cabo la intervención, fue utilizado con especial destreza para cortar por ambos lados la arandela que oprimía el miembro del paciente.
La intervención, no quirúrgica en este caso, fue llevada a cabo bajo el control de los sanitarios. De ese modo se iba enfriando el aparato (mecánico) como en el uso habitual de cualquier radial. Todo hasta que finalmente fue partida en dos trozos la arandela, liberado el miembro para tranquilidad de Bomberos, sanitarios y el paciente.
El uso de arandelas
El paciente usó una fórmula ancestral que, en su caso, tuvo bomberos para salir al paso. Según los experos, las ventajas de los anillos para el pene son: una erección más potente y duradera (por la compresión mecánica que realiza sobre el retorno vascular), el retraso de la eyaculación y un estímulo sexual distinto.
Su utilización es ancestral y no sólo da respuesta a una posible disfunción eréctil, ya que muchos de los usuarios lo utilizan sin presentar la misma, sino más bien como parte de algún fetiche sexual.