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Con los tres pasos en procesión, el inicio de la lluvia provocó la vuelta al templo de todas las imágenes
La noche del Jueves Santo de Leganés se convirtió, como consecuencia de la lluvia, es una noche especial entre los muros de la Parroquia de San Salvador. Cuando los tres pasos que componían la procesión del Jueves Santo estaban ya en la calle (el primero llegando a la calle Jeromín; el segundo, en la calle La Fuente; y el tercero en la Plaza de España) la lluvia hizo acto de presencia.
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En ese momento, sin esperar más, ‘La Soledad’ puso, a la carrera, rumbo a la parroquia. Fue la primera en entrar en el templo, minutos después lo hacían las imágenes de Jesús Nazareno y el Santísimo Cristo de la Pasión volvió apresuradamente a San Salvador. Y ahí comenzó una noche muy especial.
Todo lo que iba a pasar en la calle pasó dentro. La banda de la Agrupación Musical Fenix de la Esperanza y la soprano Rosa Gomariz, acompañada de una violonchelista y un saxofonista, interpretaron dentro del templo lo que iban a hacer en las calles. Con una parroquia repleta de fieles, fueron disfrutando de los sones de unos y de las canciones de la otra. Dentro del templo, las imágenes llevaron a cabo el tradicional encuentro entre la Soledad y el Cristo de la Pasión al ritmo de los sones del ‘Fénix de la Esperanza’.
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La tan deseada lluvia, y a la par incómoda en una noche de Jueves Santos, permitió a los leganenses disfrutar de forma inesperada de una noche bastante diferente a lo que hubiese ocurrido en las calles del centro de nuestra ciudad.
