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Los campeones de la Liga Hypermotion fueron anfitriones de una celebración inolvidable para la historia de Leganés
No fue suficiente semejante festejo el domingo. Plantilla y afición se reunieron nuevamente para sellar un eterno pacto de mutua gratitud. Ayer a las 19:00 llegaron dos buses a la casa consistorial ante un baño de masas conmocionadas. Entraron 10 minutos al establecimiento, y se fueron directo al escenario.
Espectáculo de alto nivel
A la plaza mayor, cuyas dimensiones desafían toda convocatoria, no le cabía un alfiler. Pepineros y pepineras se dieron cita para compartir alegría con su equipo. La animación estuvo a cargo de Julián Chicco y Dani Jiménez, maestros de ceremonia que se presentaron haciendo un “beatbox” de bienvenida.
Ambos se encargaron de potenciar los cantos y el éxtasis colectivo. También, se ocuparon de hacer participar a todos los jugadores en el evento. No había timidez que pudiese salvarse. Todos fueron cordialmente obligados a bailar y cantar con el argentino y el andaluz.
Así, se metían al medio Miguel De la Fuente y Diego Garcia, los goleadores blanquiazules (13 y 12 goles respectivamente). El primero le decía al segundo, con la mejor de las vibras vacilonas: “que se joda que le he ganado por un gol”. También salió Luis Perea, quien se tiñó el pelo para la ocasión, y ante el reclamo de los animadores, dijo: “me he puesto el pelo amarillo, a ver si el míster así me nota”.
Por supuesto, también hablaron Undabarrena y Diego Conde, con un poco más de seriedad pero con mucho corazón. Jorge Miramón también dijo presente, con el cabello todo pintado de azul y blanco. El defensor, quien cumplió años el mismo domingo del ascenso, sentenciaba: “en primera división vais a disfrutar mucho”.
Y así, iban pasando todos los campeones, entre ellos, el capitán, González, que coreaba: “¡es de primera, el lega es de primera, es de primera…!”.
El que hizo de todo fue Cissé, que bailó, discurseó, y, además, cantó el himno del C.D Leganés. Finalmente, salieron Borja Jiménez y el presidente Jeff Luhnow. Borja, ni bien fue invitado a hablar, ya les decía a sus jugadores: “sois unos cabrones”, como presintiendo. Dicho y hecho, Chicco y Jiménez le pusieron un banquillo para que se parase… finalizó con la frase ícono: “en Leganés los sueños se cumplen”.
Luhnow no se quedó atrás. Después de que sonara “We Are The Champions”, dijo lo siguiente: “95 años…nuestro primer campeonato…pero no va a ser el último, eso se los aseguro”, “esto no termina aquí, vamos a construir algo especial para el futuro, ¡aupa lega!”.
Pasado el acto, se extendió un poco más la fiesta en la plaza, exenta de disturbios y llena de cariño. Hoy, los jugadores se dirigen a la Puerta del Sol para una merecida recepción en el ayuntamiento.