OPINIÓN

Editorial 7: Cuando no olvidar es un derecho

Banner Horizontal

Loading

Los meses de marzo y abril traen de forma inexorable a la memoria colectiva la repetición anual de imágenes de lo sucedido en Madrid y en Leganés aquellos ya lejanos 11M y 3 de abril. En la primera fecha perdían la vida 192 personas, mientras que en la segunda se dejaba lo más preciado el GEO Javier Torronteras en una acción antiterrorista en el barrio de Leganés Norte. El monolito que hay en dicho barrio tiene una placa que reza “Por todos vosotros no tenemos derecho a olvidar”. Y así es y debe ser.

No tenemos derecho a olvidarnos de Eugenia, de Isabel, de Carmen (y el hijo que llevaba en sus entrañas), de Antonio y de Miguel. Los seis eran vecinos nuestros.

Advertisement

Como no tenemos derecho a olvidarnos de las otras 186 personas que se dejaron la vida en aquelos horribles e injusticados atentados. Como tampoco tenemos derecho a olvidarnos de la memoria del que se dejó la vida en acto de servicio en la salvaguarda de las nuestras libertades.

Aquel 3 de abril cambió el paso de un barrio que quedó marcado para siempre y que aprendió a vivir y mirar de reojo al ‘edificio que reventó’. Como si hubiese reventado solo.

Muchos no quieren recordar porque hacerlo les supone perder el sueño. No tenemos derecho a olvidar, pero sí a descansar de aquella tarde de persianas bajadas, de sirenas y tiros, de terror y ansiedad, de explosión y onda expansiva. Nadie ha olvidado ni olvidará lo que allí sucedió.

Los relatos de estas páginas son conmovedores, pero escucharlos en nuestro canal de Ivoov es aun mucho más espezulante. Son los relatos del miedo en primer persona, del terror, de la angustia, de la tensión, de la ansiedad y del dolor guardado para siempre. Por eso no tenemos derecho a olvidar, porque si lo hacemos estaremos escondiendo el dolor. La verdad de lo que sucedió está oficializada. Si hubo otra verdad está escondida en alguna cloaca que la memoria prefiere no levantar.

PUBLICIDAD

Secciones

Destacado