El CD Leganés, después de firmar en las primeras cuatro jornadas, el mejor arranque en Segunda división de toda su historia con nueve puntos sobre 12 posibles, vuelve a Butarque para medirse al Huesca. La única temporada que se acercó a este registro fue en la 2000-01, bajo la dirección de Enrique Martín, cuando con un punto menos no habían perdido un solo partido. Y lo del Huesca (sábado, 21:00) es buscando la cuarta victoria consecutiva.
“Ganar ayuda a que la gente tenga ese ánimo y esté más receptiva a querer seguir ganando”. Con esas palabras inició el técnico pepinero, Borja Jiménez, la rueda de prensa. Un balance rápido de la semana: “Corta en cuantos a días de entreno. Hemos podido entrenar con casi todos los efectivos”.
Hablando del rival aseguró que “será un rival diferente al que vimos en Ipurúa. Es posible que nos exija mucho a nuestra última línea. Un partido diferente. Tenemos claro lo que nos puede acercar a la victoria”.
La efectividad
Con respecto a la efectividad mostrada por el equipo, especialmente en la cita del otro día, aseguró que “el otro día fuimos a casa de unos de los rivales que va a estar arriba. Nos obligó bastante a defender en nuestro campo, pero estuvimos bien”. Además explicó que “el partido ante el Huesca será completamente diferente a lo que vimos en Ipurúa. Tanto por la propuesta de ellos por lo que nosotros estamos intentando hacer”.
Además insistió en que todos deben poner en valor las victorias porque “es muy difícil ganar, es muy difícil hacerlo fuera de casa y sabemos que va a ser complicado durante todo el año. Si ganamos fantástico, si perdemos no se habrá acabado el mundo”, para añadir que “es cierto que tenemos dos salidas después complicadas”. Eso sí, asegurando que “nos dejaremos el alma por conseguir la victoria ante el Huesca”.
Lograr 50 puntos
Consultado sobre el objetivo, reiteró que el objetivo son “50 puntos. Es un objetivo realista y es en lo que nos tenemos que centrar todos. A partir de ahí, si somos capaces de conseguirlos, miraremos todo lo arriba que podamos. Es muy difícil, hay equipos con presupuestos y expectativas muy altas”.
