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Las campanas de toda la Diócesis replicaron a las 09:00 de la mañana para recordar a los cientos de muertos y miles de heridos causados por el terrorismo
Este 11 de marzo, también la música recuerda a las víctimas, y lo está haciendo de una forma muy especial. El 11 de marzo fue declarado por la Comisión Europa, desde el mismo 2004, Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo. Una de las víctimas europeas del terrorismo que más han emocionado y removido conciencias en los últimos años es Ignacio Echevarría, conocido como “el héroe del monopatín”, el joven coruñés que fue asesinado por terroristas del atentado de Londres de junio de 2017. Ignacio encontró la muerte por acudir a defender a las víctimas del atentado, armado con su querido monopatín.
La Plaza de Toros de Leganés es el escenario donde se está estrenando el musical en doble sesión. La primera, que comenzó a la once de la mañana, ha contado con un llenazo absoluto para disfrutar del citado espectáculo. La segunda sesión, para el público, será a las 20:00.
Repique de campanas
Con motivo del 18º aniversario de los atentados del 11M en Madrid, las campanas de la Diócesis de Getafe han repicado este viernes 11 de marzo, a las 9.00 horas, para recordar a los cientos de muertos y miles de heridos causados por el terrorismo.
El 11 de marzo de 2004, entre las 7.36 y las 7.40 horas, se produjeron diez explosiones en cuatro trenes de Madrid que causaron casi 200 muertos y más de 1800 heridos. Fue el mayor atentado de la historia de España y el segundo en importancia cometido en Europa.
Para honrar su memoria y la del resto de víctimas del terrorismo, las campanas de iglesias, conventos, ermitas y otros edificios eclesiásticos, ubicados en cualquiera de los 48 municipios que conforman el territorio de la Diócesis de Getafe, han tocado durante tres minutos, dando sentido y solemnidad al homenaje del pueblo de Madrid hacia las víctimas. También han doblado para pedir por la paz y en especial por el fin del conflicto bélico en Ucrania
Durante los primeros dos minutos, las campanas tocarán a difuntos, en señal de solemne respeto por las personas fallecidas en los atentados; y el minuto restante repicarán (volteo) para cerrar los tres minutos con esperanza y por la paz, especialmente por el fin de la guerra en Ucrania.