La Comunidad de Madrid colabora en la difusión de la exposición Mauthausen: memorias compartidas, que hasta el 17 de junio se puede visitar en la Casa Sefarad y profundiza en la convivencia de los españoles y ciudadanos judíos de otras nacionalidades en este campo de concentración durante la Segunda Guerra Mundial. La muestra se anunciará en carteles de las estaciones de Metro de la región.
La consejera de Cultura, Turismo y Deporte de la Comunidad de Madrid, Marta Rivera de la Cruz, visitó ayer esta exhibición, comisariada por el historiador Josep Calvet. Una muestra que, a través de cinco salas y gracias a diferentes historias personales recopiladas con material audiovisual, fotografías y objetos, documenta la historia de la relación entre judíos y republicanos españoles, que se entrecruzó en los campos de concentración nazi, donde iniciaron un camino paralelo bajo la opresión y la masacre.
Mauthausen
El 8 de agosto de 1938, cinco meses después del “Anschluss” (anexión) de Austria al III Reich, llegaron los primeros presos del campo de Dachau a Mauthausen. A la hora de elegir el lugar fue decisiva su ubicación en las inmediaciones de la cantera de granito, como también ocurrió con el campo anejo de Gusen en 1940.
Los presos fueron empleados en los primeros momentos en la construcción del campo y trabajaron para empresa propiedad de la SS “Deutsche Erd- und Steinwerke GmbH.” en la producción de materiales para las obras monumentales y de prestigio de la Alemania nacionalsocialista. (Más información en https://www.mauthausen-memorial.org/es