-
Los de Idiakez lograron un punto en el segundo empate a cero consecutivo de la temporada
Viajar al Municipal de Anduva despierta siempre lo mejor en las emociones de los ‘pepineros’. En aquel campo, vinculado ‘ad eternum’ a la historia de la entidad blanquiazul, firmó la que es, hasta hoy, la página más gloriosa de su historia: el ascenso a Primera división. Suele ser una fiesta, entre los aficionados, este desplazamiento.
Y lo cierto es que debía haberlo sido más. Los de Idiakez firmaron otro empate, y a cero, como en la jornada anterior ante la Unión Deportiva Las Palmas. Los de Leganés parecen empeñarse en ser ellos mismos (con el respeto que merecen los contrarios) los que se dejen puntos por el camino para alargar la distancia con los puestos que darán derecho a disputar la fase de ascenso.
Sumar a menos velocidad
Los muy ‘blanquis’ y poco azules han sumado siete puntos de los últimos 18 disputados. Una victoria, cuatro empates y una derrota. Con muy poquito más se hubiese colado ya entre esos puestos de la nobleza futbolística de Segunda. Lo de la aristocracia (los puestos de ascenso) ya es otra cosa muy distinta (o mucho distinta que diría algún político).
De la disposición inicial de los visitantes lo que más llamó la atención fue la presencia en el once inicial del esperado Karrikaburu. La perla ‘txuri-urdin’ evidenció que tiene compañeros mucho más acostumbrados a los automatismos del equipo, lo que no rebaja un ápice la calidad que se le presupone. Pero es que a su lado se encontró a un hiperactivo e hiperactivado José Arnáiz. Suyos fueron los disparos, con más o menos picante y más o menos intensidad, hacia la portería de Herrero.
Cambio de imagen
Visto el primer tiempo, debe que ser que a Joseba Etxeberría no le debió gustar demasiado lo que había visto de los suyos. Por eso decidió tomar el mando en el arranque de la segunda parte. Y al menos, durante los primeros 15 minutos enseñó más cosas buenas que en los primeros 45.
El partido decidió no tener dueño sin encontrar razón aparente. Digo esto porque si cualquiera de los dos hubiese decidido obligar más al contrario es posible que el partido no hubiese terminado empatado a cero. Pero eso era pedir mucho. Como sería la cosa que hasta los dos entrenadores se dejaron dos cambios sin hacer. No fue la mejor tarde, pero al final quedará para la estadística un empate a cero.
LALIGA, SEGUNDA DIVISIÓN (Jornada 29ª)
CD MIRANDÉS, 0; CD LEGANÉS, 0
CD MIRANDÉS: 13. A. Herrero; 4. Alex Martín, 3. Barbu, 27. Michelis; 12. Salinas, 20. O. Rey (6. Prados, 76′), 10. Gelabert, 8. Juanlu; 14. Pinchi (18. Alvaro Sanz, 85′), 21. R. López (28. Llabres, 66′) y 9. Raúl.
CD LEGANÉS: 13. Riesgo; 2. Nyom, 3. Jorge Sáenz, 6. Sergio G.; 21. Miramon, 8. Gaku (32. Cisse, 86′), 15. 2o. Undabarranea, 17. Raba (14. F. Vico, 70′), 15. Franquesa; 19. Karrikaburu (7. Narvaez, 81′) y 10. Arnáiz.
ÁRBITRO: Ávalos Barrera (Colegio Catalán). Amonestó a los locales Barbu (39′), R. López (61′); y a los visitantes José Arnaiz (36′)
INCIDENCIAS: Estadio Municipal de Anduva (2.500).
