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La FLAV anuncia que pedirá informes externos de valoración económica de los expedientes que afecten al patrimonio municipal
La Federación Local de Asociaciones Vecinales de Leganés (FLAV) ha dicho “¡Basta ya!” al gobierno local de Santiago Llorente. Desdela citada organización se ha amenazado al ejecutivo local con “demandar informes externos de valoración económica de todos los expedientes que gestionen y afecten patrimonio municipal y para poder evitar posibles pérdidas en las cuentas públicas”.
La FLAV ha centrado gran parte de sus críticas en las negociaciones anunciadas entre el consistorio y el CD Leganés relativas a la cesión de la ID Butarque, así como de la parcela de Leganés Norte para que el club lleve a cabo una anunciada obra.
Desde dicha organización, que aglutina a las Asociaciones Vecinales de la ciudad, se ha recordado que el convenio que negocían Ayuntamiento y club supondría “la cesión de una parcela municipal de 83.980 m2. A cambio de que construya unas pistas de tenis y una pista de tiro con arco que ya teníamos”.
Parcela de 4,4 millones
Además, según una valoración de 1990, aseguran que la parcela está valorada en “4,4 millones de euros”. Critican que el convenio vaya más allá “y pretenden entregar el estadio, el campo de fútbol anexo y terrenos aledaños, cuyo valor de construcción en 1998 fue de 4,7 millones € a lo que hay que añadir 2,5 millones que ha aportado en el 2017 el Ayuntamiento de Leganés para inversiones en el estadio y el campo anexo, de uso exclusivo del CD Leganés, junto a los terrenos de la instalación deportiva Butarque; y a ese valor hay que añadir el valor del suelo”.
Aseguran de que se habla “de una cesión a una sociedad anónima por 50 años y gratuitamente”. A ello suman el coste de “los consumos de esta sociedad de luz, agua, gas, que suponen casi 700.000 € al año a las arcas municipales y que pagamos todos los vecinos de Leganés”
Por ello, indican que han decidido decir: ” ¡Basta ya! No podemos seguir permitiendo que los responsables de la mala gestión se vayan de rosita, mientras consumen las arcas municipales. Todos los expedientes tienen personas, con nombres y apellidos, responsables de su gestión, y si se cometen negligencias se deben asumir responsabilidades”.