En febrero de 2011, cuando desapareció la banda de cornetas y tambores de la Escuela de Música Pablo Casals, surgió la Asociación Músico Cultural El Fénix de la Esperanza. Cuando participan en eventos fuera de la ciudad se apellidan ‘Villa de Leganés’.
Por cuatro euros al mes los aficionados a la música, y los que no saben absolutamente nada, se acercan a un mundo en el que la más pequeñita tiene 7 años y Andrés, el más mayor 63. Entre los casi 50 que forman la Agrupación hay además varias personas con discapacidad: un autista y un síndrome de Aspergen, a los que Luis Leal, el director musical de la Agrupación asegura que hay que tratarlos “con total normalidad, como al resto”.
El pasado sábado, por segundo año consecutivo, montaron el concierto de Santa Cecilia, con un rotundo éxito de público. Pasean el nombre de Leganés allá por donde van y en este corto espacio de tiempo se han hecho un nombre en la ciudad en diferentes momentos e incluso montado un Concurso de Bandas que llenó a rebosar la Plaza de España.
Tuvieron muchos prolemas hasta encontrar un sitio (el excolegio Miguel de Unamuno) y ahora, según relata Tamara Carrasco, la presidenta de la Asociación: “nos ha dicho el Ayuntamiento que tenemos que irnos de aquí porque ha habido quejas de algún vecino”. Tamara no entiende esas quejas y menos cuando les han tirado piedras y hielo alguno de los vecinos que ahora parece ser el líder de las quejas.
Lo único que piden al Ayuntamiento es “que se sienten con nosotros para poder buscar una solución. No nos parece lo mejor que nos llame un técnico municipal para decirnos que nos tenemos que marchar. Le pedimos al alcalde y a los concejales poder vernos para trabajar en una solución que mejoré donde estamos, no que empeore”.
El trabajo de toda la Junta Directiva: Aunque alguno reconoce estar cansado ante la incertidumbre, el trabajo de la Junta Directiva por seguir adelante con la Asociación Músico Cultural y la Agrupación es encomiable.
Una autorización con carácter permanente: Firmada en 2014 por el anterior gobierno, al menos en el documento se le dice a la Agrupación que se les concede con carácter permanente. Se temen que deban salir de donde esán.
Tambores de todos los tipos: La Asociación cuenta con un larga lista de instrumentos que poco a poco han ido consiguiendo, reconociendo la ayuda que tuvieron de la Asociación Pablo Casals para arrancar.
Recogida de comida en Navidad: Los conciertos para recoger comida para el Comedor de Paquita Gallego y Cáritas les llevarán de nuevo en diciembre a varias iglesias: San Salvador, Carrascal, Leganés Norte y San Pío.